martes, 21 de febrero de 2017

#LittleVerses

¿Por qué no me puedo desapegar de ti?
¿Qué haces para seguirme cautivando?
Libérame de tu hechizo, vacía mis sentimientos, déjame sin alma.
Rómpeme el corazón cien veces a ver si así aprendo que no debo quererte más.
Ahórcame con la indiferencia, dispárame con mentiras, ahógame en el mar de tus traiciones.
Apuñálame en el corazón y no lo sanes más.
Permíteme ya no quererte, enséñame a ya no pensarte.

Termina por matarme que ya sin tu presencia mi corazón y mente agonizan de tanto extrañarte.

sábado, 18 de febrero de 2017

Dancing on my own - Robyn


I'm in the corner watching you kiss her
I'm right over here, why can't you see me 
I'm givin' it my all, but I'm not the girl you're takin' home


18 de febrero de 2017

18 de febrero de 2017
«¿Crees en la suerte?» es otra de las preguntas que me ha tocado contestar varias veces y debido a la experiencia no grata que tuve anoche (que explicaré más adelante y de la cual aún deseo se trate de un mal sueño ajeno a la realidad) voy a ahondar en este tema para responderla nuevamente, ahora a través de este medio. Mi respuesta suele ser la misma: «No, no creo en la suerte y si acaso creería en la suerte, sólo creería en la mala». Entrar en la suerte es entrar en un concepto muy ambiguo y complejo para mi mente, por ello es mucho más sencillo para mí no creer en ello. Si hablara del azar en la vida diría que todo está ya prescrito y que todo sucede por algo, no sería para mí hablar de suerte o coincidencias, para mí sería hablar del destino. Y además, como un tema adyacente, mencionaría que es más cierto pensar en el equilibrio de la vida (el ying y el yang, la simetría perfecta), de lo cual tengo algo que agregar: con el equilibrio me refiero no expresamente a tener buena o mala suerte, sino tener buenas o malas experiencias; dentro de mi filosofía si tuve una mala experiencia quiere decir que tendré una buena experiencia logrando un equilibrio y estabilidad, y por el contrario, si tuve una buena experiencia quiere decir que tendré una mala, con ello puede haber una sucesión de buenas o malas experiencias, puede ir un conjunto de malas experiencias una tras otra pero al final mi creencia o filosofía asegura que tendrá que haber al menos una que logre equilibrar la balanza; eso aplica también en cosas que pueda controlar, sí cometieron una falta contra mí y logra que yo tenga una mala experiencia (robo, engaño, traición) mi filosofía me pide que actúe y logre un equilibrio realizando una buena acción –dentro de mi concepto del bien y el mal, moralmente hablando-, pero por otro lado, si alguien hace el bien para conmigo debo continuarlo y compartirlo con otras personas, prohibido dañarlas. El destino es y seguirá siendo mi concepto del orden de la vida, la “suerte” y las “coincidencias” son parte del destino o una forma más de referirse a él. No tengo la capacidad suficiente para incluir el concepto de la suerte porque si el bien y el mal también son conceptos subjetivos, no me gusta pensar que una “fuerza” invisible influye directamente en mi andar sobre la vida, dándome éxitos o fracasos; contrario al destino, el cual ya está prescrito pero aun así yo puedo tomar libre albedrío sobre mi vida, tomar decisiones y decidir qué es lo que quiero y lo que no y de todas maneras ya está predicho, la suerte es parte de ese destino, ya está incluido pero si no lo puedo controlar no es asimilable para mí, las malas o buenas experiencias atribuidas a la suerte no son controlables (algo muy diferente son los juegos de azar en los cuales se incluye cierta estrategia mental y puede la suerte “ser controlada”), suceden y a partir de ello mi acción es equilibrar la balanza, siempre hacia el “bien”, pero la suerte implica esa fuerza incontrolable que de un momento a otro sucede, afectándome o ayudándome. Es más sencillo para mí decir que era parte de mi destino recibir una mala o buena experiencia que decir que tuve mala o buena suerte.

Anoche tuve una mala experiencia, debida a la “suerte”, y toda la situación se dio a raíz de una serie de situaciones que nos llevaron a mí y una compañera a caer en las redes de los juegos de azar. Ambos perdimos, jugamos a un ejercicio donde la estrategia mental no era una opción (tal vez un poco de destreza sí) y la fortuna se canalizó a través del lanzamiento de unas canicas y perdimos dinero. Al final del juego me deprimí, no porque perdí dinero, sino porque fallé a mis principios y jugué con el azar siendo algo incomprensible para mí aun. Tantas veces que “regañé” a mi mamá por acudir a casinos y yo me volví hacia eso que tanto le recriminé. El bolsillo no me dolió porque no arriesgué más de lo que debí, pero sí el orgullo, de haberme permitido jugar como un tonto y caer en el juego de la estafa, yo que valoro mucho la capacidad de la mente, me bloqueé y deje entrar a mis pensamientos la idea de la victoria “fácil” a través del juego, repito, faltando a mis principios. Me quedó como experiencia, prometo que en la vida me sucederá algo parecido, el bolsillo y el dinero que tenían otro destino planeado se recuperarán así como el trauma de “haber perdido” mis facultades mentales por un momento y dejarme llevar, haber caído por decisión propia y permitir que jugaran conmigo.

martes, 14 de febrero de 2017

13 de febrero de 2017

13 de febrero de 2017
Todos queremos a alguien

El día de ayer, como parte de esas cosas que el destino y la coincidencia pone en mi camino, acabé viendo una película de la cual no tenía muchas expectativas pero terminó siendo entrañable y con la que me identifiqué mucho, claro, todo dentro de mi pequeño universo. El día de ayer fue de descanso, no fue una semana desgastante pero los descansos en casa siempre son necesarios. Por la mañana comencé la tercera parte de la trilogía de Metroid: Metroid Prime 3 – Corruption, el cual ya había jugado anteriormente pero no terminé debido a fallas en el disco. Después de poco más de una hora (suele ser mi límite frente a la pantalla) dejé el juego e hice los labores del hogar que no había hecho en más de tres semanas. Sólo me enfoqué en mi habitación, había muchas cosas que no estaban en su lugar o estaban desordenadas, barrí, guardé ropa que el día anterior había lavado, acomodé sábanas y quité polvo de todos lados. Al acabar tomé un baño y me preparé para salir. Ya fuera anduve rancheando, andando por aquí y por allá en la ciudad, lugares que no había conocido hasta entonces, meramente zonas y calles por las que no había transitado, tomé algunas fotos de flores y fuentes dentro de algunas casas que me parecieron preciosos. Después llegué a mi destino, la única plaza (decente) de la ciudad era mi objetivo, ahí tenía planeado ir al cine y comer, esto último podía ser mientras veía la película porque realmente no sabía qué estaban exhibiendo y menos los horarios. Cincuenta sombras de Grey, Lego Batman, El Aro, La la land no me llamaron la atención, después de analizarlo un poco terminé por destacar Todos queremos a alguien, que pintaba ser una comedia mexicana al estilo de Nosotros los nobles gracias a que tenía en su portada a Karla Souza como protagonista, la Martha Higareda de nuestra época. No estoy menospreciando para nada Nosotros los nobles, la película me gustó y aunque no sea del todo mi agrado el nuevo enfoque del cine mexicano debido a que se valen del extranjero (más específicamente, Estados Unidos) para atraer espectadores, otros ejemplos: No se aceptan devoluciones, Me estás matando Susana, demás proyectos de Karla Souza, entre otros. Mi primer pensamiento fue que sería otra producción pseudo-hollywoodense pero entretenida, no la destacaría en otras circunstancias y sólo no acudiría a verla, pero comparándola con Cincuenta, El aro o Lego, churros, secuelas y sobre todo, opciones absurdas terminé por decidirme por Todos queremos a alguien. Había leído reseñas de La la, pero la verdad no estaba con ánimos de verla. Como sea, los horarios definirían cuál sería la función más próxima así que todo no estaba decidido. Todo se ajustó para que terminara viendo Todos queremos, que había comenzado cinco minutos antes, no tenía problemas con ello. Entré a la sala con la función que ya había comenzado y rápidamente me di cuenta que no me había equivocado, la película era una comedia y en esencia era un poco más de lo mismo que ya se ha visto últimamente en el cine mexicano, pero también me di cuenta que estaba viendo muchos temas que son muy familiares para mí. La historia fue la siguiente: Clara, una doctora ginecóloga que reside en Los Ángeles se prepara para la boda de sus padres (que al fin deciden casarse después de cuarenta años de relación) invita a un residente del hospital, Asher, para que la acompañe sin algún compromiso. En la boda se encuentra inesperadamente con su ex novio Daniel, a quien no veía desde hacía diez años tras su fuga sin aviso, razón por la cual la dejó marcada y difícilmente decide ella comenzar una relación por los miedos y fantasmas que le dejó Daniel. Diez años tras su ausencia ella lo ve y cuando cree que lo ha superado y ha madurado lo suficiente para no seguir queriéndolo, esa misma noche se derrumba y llora desconsoladamente. A raíz de ello pretende comenzar a utilizar a Asher como escudo y no caer rendida a los pies de Daniel, pero a la vez que inconscientemente empieza a encariñarse con Asher tampoco puede soltar del todo a Daniel y comienza a tener serios conflictos emocionales porque aún le carcomen los “porqués” tras la partida de Daniel y se pregunta si de verdad le importa Asher como no quiere admitir. Contra todo pronóstico, la cinta se sumergió en temas profundos sobre lo subjetivo que se convierte el amor para diferentes personas y dejó recalcadas en mi mente (y me imagino que en la de muchos que han vivido estas situaciones) muchas frases de las cuales destaco la siguiente: “Algunas personas nunca se van, pero dejan espacio para que entren otras”, frase que Asher le dice a Clara tras saber su situación con Daniel. Creo que muchos salimos identificados de alguna manera con la película, yo uno entre ellos, que vio la partida de Daniel como una metáfora de la partida de Miguel y mi conflicto emocional al seguir sintiendo por él. Creo que en gran parte de la película me vi en el lugar de Clara, enfrentando el pasado y lidiando con sentimientos y recuerdos de todo lo vivido y con la ligera esperanza en el fondo del corazón que las cosas podrían repetirse o continuarse, pero por otro lado se encuentra la oportunidad de comenzar de nuevo, dar vuelta a la página y hallar en otra persona la posibilidad de cerrar viejos círculos y ser feliz. En el marco de la festividad del amor y la amistad, veo la película y rememoro sentimientos arraigados y tengo aún fresco en la mente una discusión reciente que tuve con dos compañeros de trabajo, hablando específicamente del amor. Los tres teníamos puntos de vista diferente acerca del significado del amor, pero ninguno de nosotros estábamos equivocados, porque llegamos a la conclusión que el amor es tan subjetivo que cada uno tiene su propio significado, cada persona lo vive de diferente manera y para cada uno es nuestra verdad absoluta. Por eso creo que para mí es muy complicado encontrar a alguien con quien se tenga esa compatibilidad absoluta, porque si para mí una parte del amor es la monogamia, para la otra persona puede hacérsele fácil cometer infidelidad y aun así considerar que me ama incondicionalmente porque así son sus principios y su concepto del amor. Mientras que para mí una forma de darle la importancia debida al amor es por medio del matrimonio, para la otra persona puede que sea todo lo contrario. Y con estos ejemplos no quiero decir que encontrar el amor verdadero signifique que yo encuentre lo que busque, porque para la otra persona yo tendría algo que no le parezca y ahí deja de ser un amor perfecto; algo que yo he aprendido y he vivido a través de la experiencia, algo que es mi verdad absoluta y mi significado del amor es que todo ello se trata de ceder. Con Miguel lo aprendí muy bien y con Gustavo lo recalqué aún más, ceder es llegar a un equilibrio entre las diferencias que hay de dos personas, diferencias psicológicas como ideológicas y al final cuando se llegan a comunes acuerdos a través de las vivencias se puede lograr armonía y estabilidad y para mí esa es una parte importante del amor, porque a pesar de soñar con el amor perfecto, soy consciente que es muy complicado encontrarlo y todo amor debe construirse y trabajarse, para mí no hay amor a primera vista, el amor crece o decrece con el tiempo y son estos actos de ceder los que logran el equilibrio y armonía, enamoran y hacen que el amor crezca. Estoy consciente de cualquier posibilidad con cualquier persona, a veces la indicada puede aparecer de pronto o siempre pudo haber estado a mi lado y me conozco tan bien como para saber con quienes puedo lograr una chispa mutua, con quienes abrirme en mente y corazón y con quienes ni siquiera intentarlo. Para quienes me abro, aprendí que no hay garantías para nada, estar en una relación y estar uno o ambos enamorados no implica que será para siempre, porque nadie nos pertenecemos. Un día, sin previo aviso, uno de los dos puede irse.

sábado, 11 de febrero de 2017

11 de febrero de 2017

11 de febrero de 2017
Por más que lo pienso no sé cómo lidiar con ello, la forma más sencilla es que de verdad me deje de importar su persona, pero es complicado a estas alturas; a pesar que podría decirse que debido a tanta indiferencia involucrada la cosa sería sencillísima, lo cierto es que antes que tomar una decisión precipitada, me interesa mucho, o mejor dicho, me intriga y genera demasiada curiosidad cómo funciona realmente su mente. A Miguel siempre lo he definido como una persona con la cual comparto muchísimas cosas, también me he jactado de conocerlo muy bien, aunque no me atrevería a asegurar que lo conozco mejor o menos que persona alguna en particular, no puedo comparar ese conocimiento porque no estoy seguro si lo conozco demasiado bien como yo creo, o por el contrario, efectivamente lo conozco lo suficiente o mejor de lo que realmente pienso. Mi mayor duda al respecto es saber si realmente dice siempre lo que piensa, o en su defecto, si dice siempre la verdad. Yo sé que este tema es demasiado trillado, incluso para mí, siempre le doy y le doy vueltas a este asunto que hasta a mí ya me crea hastío, no digamos a Miguel, pero hubo algo siempre en él que no me hacía confiar del todo en su persona, tras la experiencia vivida fue todavía más difícil confiar plenamente en él, las precauciones continuaron y continúan aún después de haber pasado mucho tiempo de lo ocurrido; puede que a final de cuentas sea esto solamente mi impresión y no algo real, sólo algo creado por mí debido al miedo a una nueva traición, estar constantemente alerta ante cualquier ofensa y tener preparada mi debida defensa.

La cosa resulta así: no sé cómo lidiar con Miguel actualmente. Desconozco si su indiferencia es real o está actuándola, como precavidamente yo hago. No quiero interrumpir su felicidad, por algunas fuentes confiables me he enterado lo bien que lleva su relación y que (como yo en su momento con Gustavo, por lo cual no puedo ni debo culparlo o recriminarle) hablan ambos del futuro. Es curioso cómo cambia la forma de ver una acción desde un punto diferente de perspectiva, es decir: con Gustavo constantemente hablaba del futuro de nosotros, hablando en varias ocasiones de un por siempre, del cual yo no sé aún si existe y del cual no estaba seguro con Gustavo si existiría, esto se lo comentaba incluso a Miguel y claramente me era sencillo hablar de él porque estaba yo en el puesto del ganador (me gusta usar este término, el cual ha sido una pequeña constante en mi vida amorosa debido a los triángulos amorosos que he experimentado), desde donde yo estaba en la posición de “elegir entre dos personas” que estaban enamoradas de mí, en ese entonces: Gustavo y Miguel; sé muy bien las ventajas de estar en esa posición porque era consciente de ello y porque en ocasiones sabía que podía aprovecharlas. No quiero malinterpretarme, no los usaba para controlar a la gente, nunca llegué a controlar a Miguel o a Gustavo, porque no se me hacía apropiado y porque soy muy malo para ser malvado, soy patético, y no es para santificarme y decir que nunca llegué a hacer algo malo porque sí lo hice, consciente e inconscientemente. Estar en el puesto del ganador me permitió crear barreras en ambos, si no quería revelar algo, no tenía por qué hacerlo e inconscientemente era el dominante ante ambas personas, porque sabía que ambas me querían y para estar conmigo debían adaptarse a mí. Con Gustavo yo obtuve lo que siempre quise con Miguel: una relación sólida, por ello hablar del futuro con él, aunque hubiera muchas dudas al respecto, era sencillo y a final de cuentas era algo que sí quería ofrecerle, porque le quería y porque obtenía todo lo que quería en una relación, él me lo ofreció, lo acepté y le fui recíproco; no mentí en decirle en esas ocasiones que quería estar con él y que me veía en una posible unión matrimonial. Gustavo sólo tuvo un único defecto del cual me arrepiento tanto: él no era Miguel. Por más que Gustavo me diera, él me enamoraba y yo quería seguirle enamorando, por haberme dado tanto, pero sencillamente seguía pensando en Miguel. ¿Por qué?, porque quería que Miguel fuera Gustavo; Gustavo era el Miguel que yo soñaba, pero no podían ser ambos tan diferentes. Estando en una relación con Gustavo y teniendo a Miguel aun pensando en mí, la situación se tornaba muy cómoda, podría decirse que hasta había una cuestión de autoestima incluida. Pero después de analizar profundamente el hecho que yo informara a Miguel que Gustavo era para mí eso que yo buscaba en una relación, que hablábamos del futuro y que a la vez fuéramos tan diferentes y no me viera del todo con él, me pregunto ahora: ¿cómo veía él esta situación mía?, él comentaba siempre lo feliz que estaba por mí, me felicitaba por los días en que cumplía meses de novios con Gustavo, se interesaba por lo que sucedía entre nosotros y preguntaba constantemente por mí, pero, detrás de toda ese regocijo por verme con Gustavo, ¿no escondía una sombra de envidia o celos por estar yo con otra persona y que gracias a mi perspectiva supiera que esa persona me estaba ofreciendo más de lo que él podía? Miguel seguramente no lo admitiría si fuera cierto (y es una de las cosas que me intrigan de él). Porque ahora estoy yo del otro lado. Ahora él es que está a punto de cumplir un año con su pareja, con Tzen. Yo estoy lejos de mi familia, amigos y del puesto del ganador me brinqué ahora al puesto del perdedor, porque fuera del hecho de estar tomando estos títulos en un sentido de pertenencia, donde tener una persona a tu lado significa ganar y no tenerla significa perder, el hecho es que perdí a Gustavo por mi traición indirecta y perdí a Miguel por haberlo tratado con mucha indiferencia aquéllos meses. A pesar de estar con Gustavo aún pensaba en Miguel, como he repetido tantas veces, en lo más hondo de mi ser Gustavo era una especie de reemplazo mientras Miguel regresaba de Alemania (y esta es una de las razones por las que me considero una persona malvada), por lo que al transcurrir dos años Miguel y yo, en mis fantasías, regresaríamos a continuar lo que dejamos pendiente. Yo pensaba eso estando con Gustavo, mi barrera creada con Miguel estaba estable porque pensaba que él estaría esperándome, él mencionó muchas veces que no pensaba llegar a tener ninguna relación estando allá porque se enfocaría en viajar y propiamente a estudiar, yo “confié” en él en ese sentido, por eso mi barrera se derrumbó al él comenzar a salir con Tzen, la estabilidad que yo creía tener con él me hizo nuevamente entrar en un limbo, las incoherencias y la falta de raciocinio regresaron y terminaron por provocar un rompimiento en el lazo que había estado trabajando con Miguel, hablando específicamente de la relación epistolar que llevábamos, porque mi lógica en ese entonces era que su palabra era inválida y esperarme y encontrarnos de nuevo fueron una mentira más dicha por su persona al intentar relacionarse con alguien más. En mi mente constantemente me preguntaba «si dice que va a esperarme y que regresaríamos tras el paso de los dos años, ¿cómo es posible que pretenda buscar una nueva relación?» así como alguna vez me preguntaba constantemente «si es a mí a quien quiere y nombra incluso el amor de su vida, ¿cómo es que no puede decidirse entre Francisco y yo?», sencillamente no lo comprendía. Lo más sencillo fue cortar los lazos, dejar la mentira (porque esas acciones significaban para mí una traición a su propia palabra) y continuar con quien sí me estaba entregando todo, así entregarle yo también ese todo, intentarlo hasta lograrlo y olvidar a Miguel. Pero lo cierto es que no pude, y ese fue mi mayor error con Gustavo, porque a pesar de ver inconscientemente todo lo que no fue Miguel en él, yo seguía buscando y viendo en mi mente el calendario y seguía tachando los días hasta que los dos años transcurrieran. Miguel estuvo en el puesto ganador al no decidirse entre Francisco o yo y aún desconozco el conflicto mental con que lidió, pero tras el paso de todo este tiempo, vuelve a estar en el puesto ganador porque tiene a Tzen y muy lejos, en lo más recóndito de su corazón y de su mente, me tiene a mí. Pero no sé completamente si aún me considere en su corazón y mente, porque si no es así el puesto del ganador no sería. Si ya me ha olvidado soy yo únicamente el que lucha por algo inexistente, y no porque propiamente luche por él, porque no quiero hacerlo momentáneamente, sino porque quiero seguir estando al pendiente de él, aunque no lo parezca. Pero he aquí mi conflicto más grande con él: no sé lo que piensa. ¿Por qué a veces me ignora?, ¿por qué en diversas ocasiones no responde mis mensaje tomando una postura de “tengo cosas más importantes que atender antes que lo que tengas que decir”?, ¿por qué cada vez es más fría su conversación?, ¿por qué raramente habla de su vida u omite, estratégicamente, datos esenciales que antes estábamos acostumbrados a revelar? Hace días releí (por accidente) una conversación pasada. Él me envió un correo de cumpleaños y una frase llamó mi atención: “no quiero moverle a las cosas” alegando que no quería contar más cosas de las debidas a causa de mi decisión. Inmediatamente me pregunté: ¿su actitud actual es una consecuencia persistente de este hecho?, ¿está creando una barrera contra mí a causa mía (y es acaso un castigo, también)? Y más importante, me hace preguntarme: ¿su actitud es fingida a causa de esto mencionado o realmente ya no le importo un comino? No puedo dormir a causa de estas preguntas sin respuesta. No sé qué hacer, me carcome la duda. Es tan fácil y sencillo decirme: “ya no te quiero, ahora estoy con Tzen y con él me veo”. Eso terminaría por cimentar una barrera que crearía y bloquearía mis sentimientos hasta el punto de ordenarles que dejen de sentir por él, porque nuevamente se convertiría en un amor imposible y prohibido.

miércoles, 8 de febrero de 2017

08 de febrero de 2017

08 de febrero de 2017
Poirot investiga y un fin de semana largo
Ya he tenido varios días sin escribir y publicar de esta manera, puede que me haya aburrido de escribir, consecuencia de la “rutina”; haya exprimido mis ideas y no sepa sobre qué escribir realmente; o, tenga ya un considerable progreso en el proceso de recuperación emocional. Cualquiera es posible, puede que sea más la pereza y por consecuencia sea una mezcla entre la primera y segunda opción, de la tercera qué más quisiera yo que sea cierta pero la verdad es que aún no estoy listo y recuperado. ¿De qué, realmente?, del mal de amor, el despecho y soledad. Tal parece que a pesar de estar acostumbrado a la soledad, en este caso aún no la asimilo y no me adapto enteramente a estar sólo, o bien, que nadie me sea recíproco sentimentalmente. Como me ha dicho constantemente un amigo: “el hombre no nació para estar sólo”, se lo acepto, pero en mi situación (y no con afán de dramatizar) lo siento complicado, por razones que anteriormente he mencionado aquí, principalmente no saber exactamente lo que quiero.

En fin, estos temas psicológicos son para otra ocasión, no quisiera profundizar ahora. Estas dos últimas semanas han estado llenas de actividad. Bueno, entre semana suele estar un tanto muerto el asunto, pero en estos últimos fines de semana hubo suficiente actividad en recompensa. Después de mi regreso de mi viaje de descanso de Monterrey tenía una tarea que cumplir: realizar el primer reto de mi meta anual de cocinar cada receta incluidas en el libro Como agua para chocolate, como menciono en mi anterior entrada, fue todo un éxito con mis compañeros de trabajo. Planeé la preparación de la comida para la noche previa al día de la Candelaria y así cumplir con el reto y mi dote tras haber sacado el muñeco del niño Dios de la Rosca de reyes. De por sí ya sabía que esa semana sería corta debido a que el sábado me estaría reuniendo con una amiga (probablemente única lectora de mi blog de mi círculo de amigos) en Hidalgo para pasar el fin de semana largo visitando un nuevo estado de la república. Lo cual fue toda una odisea, ya que, tomando este medio como confesión, me escapé del trabajo el viernes por la tarde argumentando un imprevisto y mintiendo que iría a Monterrey cuando en realidad me dirigía a Hidalgo. Para ser una mentira creo que me salió bien ya que no soy nada bueno con ellas, pero sabía que si pedía permiso no me lo darían y ya había pagado el costo del tour al cual me uniría, ya que Myrna lo tomaría desde Monterrey. Durante la semana discretamente estuve planeando mi huida, mi primer destino sería visitar las grutas de Tolantongo y según mi trazado, debía llegar al pueblo de Ixmiquilpan y de ahí moverme a las grutas. Tenía desde la noche del viernes hasta casi mediodía del sábado para llegar al punto de reunión, busqué todas las alternativas ya que aparentemente no había una corrida directa de mi ciudad a Ixmiquilpan; mi opción más viable se convirtió en trasladarme hacia Pachuca, dormir en la ciudad, ya sea en un hotel o en la terminal de autobuses (debido a mi corta estancia en la ciudad), y moverme desde primera hora al pueblo y posteriormente a mi destino. El viernes llegó y todo salió muy bien, mi maleta ya estaba lista y esperándome en casa, salí de mi jornada laboral antes que los demás para no encontrarme a nadie en casa y que no vieran que salí con maleta preparada evitando sospechas, me dirigí a la terminal de autobuses y tomé el autobús planeado y durante el trayecto intenté recuperar algunas horas de sueño perdidas que fui arrastrando desde la semana que estuve en Monterrey. Pocas veces he experimentado situaciones en las que durante el sueño se logran mágicamente asuntos como la tarea o el trabajo terminados, en esta ocasión no tuve un sueño así, pero si lo hubiese tenido al despertar sería mucho más sorprendente mi asombro. Alrededor de medianoche, después de cuatro horas de camino, las luces se encendieron, el chofer se detuvo y gritó el nombre de un pueblo inentendible para mi capacidad después de despertar de un sueño profundo. Me pregunté en medio de mi modorra dónde me encontraba, abrí la aplicación de mapas y creí encontrarme en un sueño, resultó que había llegado “por error” al destino en el que debía estar por la mañana; me desperecé, bajé rápidamente del autobús y busqué al conductor para confirmar lo que decía en mi celular. Había llegado al pueblo de Ixmiquilpan y rápido se me quitó el sueño, mi desconcierto se lo expresé muy bien al conductor que este me pidió primero “despertarme” para poder hacerme entender debido a que balbuceaba mucho por no saber qué palabras usar para expresar mi regocijo. Bajé junto con un joven, tal vez de mi edad, y juntos buscamos hotel dónde pasar la noche ya que se había convertido en una necesidad para mí. Ahora debía esperar hasta las ocho o nueve de la mañana para moverme a las grutas. Encontramos un hotel gracias a que el chico ya había estado antes en el pueblo y conocía un hotel barato. Tras tener mi habitación tuve muchos problemas para dormir, por lo que terminé agarrando el sueño muy tarde. Desperté y mi intención inicial fue dar una vuelta por el centro antes de partir, pero el recepcionista me dejó a cargo un grupo de muchachas estadounidenses después que le comenté mis intenciones de ir a las grutas de Tolantongo. No desaproveché la oportunidad y lo vi como una posibilidad de platicar en inglés con las chicas. Resultaron en su mayoría muy agradables, me comentaron que llevaban ya un mes en México y planeaban dejarlo hasta principios de mayo, entre ellas tenían un mes de conocerse y todas provenían de distintos lugares. Juntos fuimos hacia el lugar donde salían los transportes hacia las grutas e incluso algunas se sorprendieron de mis habilidades al comunicarme en inglés con ellas, me preguntaron dónde lo había aprendido y les comenté que básicamente por mi cuenta; les platiqué un poco de mis viajes y les recomendé sitios a visitar debido a su larga estancia en el país, se emocionaron un poco y alegaron tomar en cuenta mis consejos. Juntos viajamos así hacia las grutas, yo me quedé rezagado en un paraje ya que ahí había acordado verme con Myrna. El viaje comenzó con el pie derecho y me agradaba. Después de ello todo resultó de maravilla: ese día visitamos las grutas de Tolantongo, las pozas termales, descansamos en el agua y tomamos muchas fotos del paisaje, de regreso nos dirigimos a Pachuca donde pasamos (Myrna y yo) a cenar en un restaurante argentino; al día siguiente visitamos los pueblos mágicos de Huasca del campo donde conocimos el centro histórico y una Hacienda, Real del monte, donde disfrutamos del pueblo y la compra de plata, así como una breve visita (para mi desgracia) a los Prismas basálticos, el real atractivo de mi viaje; el tercer y último día estuvimos conociendo el centro de Pachuca, al cual catalogué como el tercer mejor centro histórico de una ciudad visitado hasta ahora, por detrás de Puebla y Morelia. Regresé a la ciudad a mediodía del tercer día y aproveché el largo trayecto de regreso para terminar el quinto título del año: Poirot investiga. Al libro al inicio no le di su debida importancia ya que sabía de por medio que no se trataba de una novela como las que anteriormente había leído de la autora, sino que se trataba de una recopilación de cuentos cortos donde el protagonista, sobra mencionar: Hércules Poirot, resuelve misterios en robos, asesinatos o delitos con pocos enredos como he estado acostumbrado. Lo comencé con poco entusiasmo, pero al leer una reseña donde aclaraba que me encontraría con historias regocijantes y ligeras lo traté de ver con esta perspectiva, la cual terminó por ser correcta. Sobre todos los cuentos, destaco en los que no hubo asesinatos, ya que le dio otro giro a la redacción de la autora, donde no siempre hay sangre y Poirot es contratado también para investigar robos o desapariciones. A pesar de ser breves se nota la madurez de Christie y a mí me dio una pauta de lo que me espera en próximos títulos ya que, según he leído acerca de ella, en una parte de su vida tuvo la fortuna de visitar zonas arqueológicas al lado de uno de sus esposos y así tomar base de ideas para historias futuras. Hércules Poirot me sigue sorprendiendo, aún no logro dar con el asesino o delincuente antes de ser descubierto, excepcionalmente pude acercarme mucho a resolver el acertijo del quinto cuento: El robo del millón de dólares en bonos, por lo que parcialmente me satisfice de mí mismo. Al final quedé muy contento al haberlo terminado porque fue una especie de interludio para continuar con novelas “largas” de la autora y tratar nuevamente de resolverlo antes que Poirot lo revele. Mi siguiente reto es El asesinato de Roger Ackroyd, el cual ya he comenzado. Tengo grandes expectativas de él y buenas referencias, espero próximamente escribir de ello. Después de llegar a la ciudad y en los días posteriores pocas oportunidades he tenido de recuperar las horas perdidas de sueño, aunque lo cierto es que durante el fin de semana pude dormir muy bien y a gusto, sin la presión del trabajo. Los siguientes fines de semana pintan para ser de entero descanso y espero sean así.

martes, 7 de febrero de 2017

Lista de los 111 Pueblos mágicos


PUEBLO MÁGICO                                                    STATUS

1.         Álamos, Sonora                                
2.         Arteaga, Coahuila                                          VISITADO
3.         Bacalar, Quintana Roo
4.         Batopilas, Chihuahua
5.         Bernal, Querétaro                                          VISITADO
6.         Cadereyta de Montes, Querétaro
7.         Calvillo, Aguascalientes
8.         Capulálpam de Méndez, Oaxaca
9.         Chiapa de Corzo, Chiapas
10.      Chignahuapan, Puebla
11.      Cholula, Puebla                                             VISITADO
12.      Coatepec, Veracruz
13.      Comala, Colima
14.      Comitán, Chiapas
15.      Cosalá, Sinaloa
16.      Creel, Chihuahua                                           DE PASO
17.      Cuatro Ciénegas, Coahuila                            VISITADO
18.      Cuetzalan del Progreso, Puebla
19.      Cuitzeo, Michoacán
20.      Dolores Hidalgo, Guanajuato                        VISITADO
21.      El Oro, México
22.      El Rosario, Sinaloa
23.      El Fuerte, Sinaloa                                          DE PASO
24.      Huamantla, Tlaxcala
25.      Huasca de Ocampo, Hidalgo                         VISITADO
26.      Huichapan, Hidalgo
27.      Izamal, Yucatán
28.      Jala, Nayarit
29.      Jalpa, Guanajuato
30.      Jalpan de Serra, Querétaro
31.      Jeréz de García Salinas, Zacatecas
32.      Jiquilpan, Michoacán
33.      Loreto, Baja California Sur
34.      Lagos de Moreno, Jalisco
35.      Magdalena de Kino, Sonora
36.      Malinalco, México
37.      Mapimi, Durango
38.      Mazamitla, Jalisco
39.      Metepec, México
40.      Mier, Tamaulipas
41.      Mineral de Angangueo, Michoacán              VISITADO
42.      Mineral de Pozos, Guanajuato
43.      Mineral del Chico, Hidalgo
44.      Nochistlán, Zacatecas
45.      Pahuatlán, Puebla
46.      Palizada, Campeche
47.      Papantla, Veracruz
48.      Parras de la Fuente, Coahuila                        VISITADO
49.      Pátzcuaro, Michoacán
50.      Pino, Zacatecas
51.      Real de Asientos, Aguascalientes
52.      Real de Catorce, San Luis Potosi                   VISITADO
53.      Real de Monte, Hidalgo                                 VISITADO
54.      Salvatierra, Guanajuato
55.      San Cristobal de las Casas, Chiapas
56.      San Sebastián del Oeste, Jalisco
57.      Santa Clara del Cobre, Michoacán
58.      Santiago, Nuevo León                                    VISITADO
59.      Sombrerete, Zacatecas
60.      Tacámbaro, Michoacán
61.      Tapalpa, Jalisco
62.      Tapijulapa, Tabasco
63.      Taxco, Guerrero
64.      Tecate, Baja California
65.      Tepotzotlán, México
66.      Tepoztlán, Morelos
67.      Tequila, Jalisco                                               VISITADO
68.      Tequisquiapan, Querétaro
69.      Teúl de González Ortega, Zacatecas
70.      Tlatlauquitepec, Puebla
71.      Tlayacapan, Morelos
72.      Tlalpujahua, Michoacán
73.      Todos Santos, Baja California Sur                 VISITADO
74.      Tula, Tamaulipas
75.      Tulum, Quintana Roo                                     VISITADO
76.      Tzintzuntzan, Michoacán
77.      Valladolid, Yucatán                                        VISITADO
78.      Valle de Bravo, México
79.      Viesca, Coahuila
80.      Xico, Veracruz
81.      Xicotepec,Puebla
82.      Xilitla, San Luis Potosí
83.      Yuriria, Guanajuato
84.      Zacatlán, Puebla
85.      Aculco, Edo de México
86.      Atlixco, Puebla
87.      Candela, Coahuila
88.      Casas Grandes, Chihuahua
89.      Coscomatepec, Veracruz
90.      Guerrero, en Coahuila
91.      Huauchinango,Puebla
92.      Huautla de Jiménez, Oaxaca
93.      Isla Mujeres, Quintana Roo                            VISITADO
94.      Ixtapan de la Sal, Edo de México
95.      Linares, nuevo León
96.      Mascota, Jalisco
97.      Mazunte, Oaxaca
98.      Mocorito, Sinaloa
99.      Orizaba, Veracruz
100.   Palenque, Chiapas
101.   San Joaquín, Querétaro
102.   San José de Gracia, Aguascalientes               VISITADO
103.   San Juan Teotihuacán Edo de México           VISITADO
104.   San Pablo Villa Mitla, Oaxaca
105.   San Pedro y San Pablo Teposcolula, Oaxaca
106.   Sayulita, Nayarit
107.   Talpa de Allende, Jalisco
108.   Tecozautla, Hidalgo
109.   Tlaxco, Tlaxcala
110.   Tulum, Quintana Roo                                     VISITADO
111.   Villa del carbón , Edo de México

112.   Zozocolco, Veracruz

Enlisto de esta manera los ciento once pueblos mágicos de México, el estado en el que se encuentran y si este ya fue visitado. No pretendo de alguna manera llenarla, aunque obviamente sería todo un reto lograrlo, pero sí hacer hasta el momento un corte y evidenciar el trayecto que he recorrido a través del país, con sus costumbres y tradiciones de por medio.
En este último viaje me tocó conocer dos de los pueblos mágicos, uno de ellos el primero en ser nombrado como tal. Realmente consistió en una experiencia maravillosa porque a pesar de contar con características en común con otros pueblos y ciudades de México, estos dos pueblos mágicos tenían lo suyo. Agradecido de tener la oportunidad de conocer más a México, a ir siempre por más.

viernes, 3 de febrero de 2017

Enero - Tortas de Navidad

Tortas de Navidad
I. Enero

Tortas de Navidad servidas y listas para comer


INGREDIENTES:
   1 lata de sardinas
   ½ chorizo
   1 cebolla
   Orégano
   1 lata de chiles serranos
   10 teleras
   Manera de hacerse:
   La cebolla tiene que estar finamente picada. Les sugiero ponerse un pequeño trozo de cebolla en la mollera con el fin de evitar el molesto lagrimeo que se produce cuando uno la está cortando. Lo malo de llorar cuando uno pica cebolla no es el simple hecho de llorar, sino que a veces uno empieza, como quien dice, se pica, y ya no puede parar. No sé si a ustedes les ha pasado pero a mí la mera verdad sí. Infinidad de veces. Mamá decía que era porque yo soy igual de sensible a la cebolla que Tita, mi tía abuela.
Hay que tener cuidado de freír el chorizo para las tortas a fuego muy lento, para que de esta manera quede bien cocido, pero sin dorarse excesivamente. En cuanto está listo se retira del fuego y se le incorporan las sardinas, a las que con anterioridad se las ha despojado del esqueleto. Es necesario, también, rasparles con un cuchillo las manchas negras que tienen sobre la piel. Junto con las sardinas se mezclan la cebolla, los chiles picados y el orégano molido. Se deja reposar la preparación, antes de rellenar las tortas.
De preferencia las teleras deben ser horneadas en casa. Pero si no se puede, lo más conveniente es encargar en la panadería unas teleras pequeñas, pues las grandes no funcionan adecuadamente para esta receta. Después de rellenarlas se meten diez minutos al horno y se sirven calientes. Lo ideal es dejarlas al sereno toda una noche envueltas en una tela, para que el pan se impregne con la grasa del chorizo.
El primer reto del año fue cumplido con éxito. No recuerdo si anteriormente lo había mencionado, pero como un leve reto por proponerme alguna especie de reto anual (parecido a lo que hice hace tres años, de conocer al menos un lugar nuevo cada mes), me propuse realizar cada una de las recetas que viene en el libro Como agua para chocolate. Ayuda mucho el hecho que el libro esté dividido en doce capítulos correspondiente a cada mes del año, y que cada mes del mismo sea una receta nueva y diferente, y mucho mejor aún que cada una tenga un encanto especial de la gastronomía mexicana.

Este primer reto me pareció oportuno realizarlo un poco aplazado debido a que me tocó ofrecer dote gracias a la rosca de reyes y vi la oportunidad de cumplirlo el dos de febrero, día de la candelaria. A pesar de que la tradición dicta que sean tamales los que se ofrezcan en la fecha me pareció oportuno experimentar en la cocina con mis compañeros en esta fecha. No voy a dar demasiados detalles del proceso y el resultado, pero sí mencionaré que me entusiasmé demasiado al comprar los ingredientes, prepararlos cada uno de ellos, cocinarlos en el sartén y sobre todo servirlos. Resalto el gran entusiasmo y excitación porque mis compañeros probaran el guisado y conocer sus reacciones, incluso no quise probar bocado hasta el día siguiente para sorprenderme del resultado, ya que sería la primera vez que cocinaba y consumía sardinas y desconocía qué tan eficaz sería el chorizo para cubrir el penetrante olor del marisco. El resultado fue muy positivo, muchos de mis compañeros me dieron aprobación del platillo y me felicitaron, otros apenas lo mencionaron pero al menos no dijeron nada malo, yo mismo lo probé y aunque no me pareció un platillo excepcional y que raramente comería de forma más consecuente, sí fue satisfactorio. Me he entusiasmado más aún ya que el siguiente reto, en el cual ya estoy dentro, es mera repostería y poca experiencia (al menos sin ayuda) he tenido cocinando en horno. Pastel chabela mi siguiente reto.

miércoles, 1 de febrero de 2017